La Fotoprotección sistémica es aquella que va más allá de la piel y actúa a nivel general en el interior de nuestro organismo. Se trata de un grupo de inmunofotoprotectores que se administran por vía oral. La principal ventaja es que al ser sistémicos su protección es global y actúan sobre toda la superfície cutánea
Los fotoprotectores sistémicos o orales son sustancias inmunofotoprotectoras administradas vía oral (cápsulas, comprimidos, solución), en su mayoría antioxidantes, se encargan de eliminar los radicales libres que se generan en nuestra piel a causa de muchos factores, entre ellos, la radiación solar.
Uno de los aspectos fundamentales que hay que destacar es que al ser sistémicos su protección es global, o sea, actúan en toda nuestra piel. Entre éstos encontramos:
Betacarotenos: se suelen adminsitrar para las intolerancias solares o como preventivo en personas con piel blanca.
Comercialmente, pueden llevar a la confusión ya que muchas personas piensan que se usan para ponerse moreno o ir adquiriendo color antes de la exposición solar.
En realidad, preparan al organismo para una exposición solar y se producirá un aumento de pigmentos para que disminuya la aparición rápida del eritema, aunque hay que tener en cuenta que éstos no son preventivos del cáncer de piel.
- Vitaminas C y E
- Polifenoles del té verde
- Polypodium leucotomos
El más utilizado es el ácido ascórbico o vitamina C , que además estimula la síntesis de colágeno con lo que la reparación de tejido dañado es aún más rápida.
También la vitamina E o alfa-tocoferol protege frente al UVB y suele combinarse con la vitamina C para una mayor eficacia. Como otras sustancias, tenemos los carotenoides ( la luteína es un ejemplo), flavonoides (se utilizan de la silimarina y del trébol rojo), Omega-3 (los ácidos grasos como el linoléico y linolénico proporcionan efecto antiimflamatorio y antioxidante además de fotoprotector) y Polifenoles del té verde (reducen eritema y la inflamación cuando hay quemadura solar).